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Todo parece indicar en el tablero priista que el actual coordinador del PRI en la Cámara de Diputados hará enroque con el presidente nacional del partido, César Camacho, y desde el 1 de septiembre veremos a Manlio Fabio Beltrones despachar en el edificio de Buenavista y al mexiquense en San Lázaro. Así, al sonorense se le mantendrá minimizado en sus funciones, ya que no hay visos de que pudiera ocupar una secretaría de estado o formar parte del gabinete ampliado. Sus aspiraciones fueron muy altas hace tres años, ser el candidato del PRI a la presidencia de México y ahora sólo le queda Sonora, como su último bastión en el sexenio. De tal modo que ha desplegado su amplia red de contactos dentro y fuera del PRI para que Claudia Pavlovich, su abanderada, obtenga el triunfo electoral el 7 de junio. No olvidemos que Beltrones tiene “buenos amigos” en todos los partidos incluidos el PAN y el PRD en Sonora. Recordemos que en las pasadas elecciones estatales dio un fuerte empujón al panista Guillermo Padres para que ganara la gubernatura, en contra del PRI de Eduardo Bours. Y años atrás, cuando fue gobernador, respaldó al PRD a través de Jesús Zambrano, para que el partido amarillo creciera en esa entidad donde no figuraba. Pago de favores El pago de favores ya comenzó. Fue a mediados de la campaña con la petición del voto útil a favor del PRI y no del PAN, que inició Ana Gabriela Guevara del PT y ahora la militantes del PRD. Quizá gracias a ello, en gran parte, las recientes encuestas han revirado y, a una semana de los comicios, colocan a Claudia Pavlovich a la delantera en las preferencias electorales. Ante tal panorama hasta los panistas –por pragmáticos—podrían inclinarse a favor de la priista. Dentro de estos podría contarse incluso el propio gobernador Guillermo Padrés, compañero de legislatura de Beltrones en el Senado de la República, con quien estrechó lazos desde sus tiempos de legisladores. El apoyo que a última hora podría otorgar el mandatario panista al tricolor en estas elecciones podría ser un hecho consumado, sobre todo luego de que Javier Gándara, candidato del PAN al gobierno del estado, declaró públicamente que de llegar a ser gobernador no protegería a Guillermo Padrés, acusado de enriquecimiento inexplicable. Y mientras las palabras de Gándara sean discurso o no, Padrés Elías, oriundo de Cananea, podrían buscar la frondosa sombra de Manlio Fabio Beltrones, el patriarca de Sonora para el PAN y el PRD; a fin de evitar la anunciada cacería de brujas. Al tiempo |
