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De ser congruente con su discurso de que se hará justicia en el caso Ayotzinapa, el presidente Enrique Peña Nieto, de regreso de la gira por China, solicitaría al Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, su dimisión al cargo. Y es que el titular de la PGR ha mostrado una ineficiencia inaudita, negligencia y omisiones graves en las investigaciones del caso; como aquella de no incluir en el informe preliminar a la prensa este viernes, las declaraciones de policías municipales, elementos del ejército y del propio ex alcalde de Iguala, José Luis Abarca. Sobre las declaraciones ministeriales de las autoridades que participaron en el atroz hecho, desde dar la orden de contenerlos, levantarlos, matarlos y desaparecer las evidencias, hay un gran silencio. En cuyo vacío debe buscarse la Verdad sobre la desaparición forzada de los estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa y su virtual asesinato. La captura del ex alcalde perredista, de la corriente Nueva Izquierda, y su esposa, líder del grupo criminal Guerreros Unidos, también ha representado en este esquema de investigación una burla para los mexicanos. Pues todos lo que tengan el mínimo conocimiento de la cómo opera la policía, queda claro que al delincuente no se le da tiempo de nada en el momento de su aprehensión, so pena de ser sorprendidos los uniformados o que los criminales se quiten la vida. Y en la captura de los Abarca se muestra una escena distinta. Por las falsedades, vacíos, silencios y omisiones en el informe preliminar ofrecido por el procurador Murillo Karam el funcionario es candidato a ser cesado ya. La conjetura Dicen que en política nada es casual. Así, la inconformidad social y la crítica al gobierno federal a nivel nacional e internacional a partir del caso Ayotzinapa ¿será obra y gracia de algún político? La duda no porque el caso no lo amerite, sino porque antes de Iguala todo estaba en penumbra a pesar de que se han registrado, lamentablemente, otras tantas matanzas colectivas. Las fosas encontradas en Guerrero lo constatan. En términos políticos los más golpeados de este asunto son los miembros del grupo Hidalgo, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, en primer lugar y el procurador Jesús Murillo, en segundo. Al parecer hay una mente detrás de la derrota mediática del grupo hidalguense, que obra con más ahínco luego del acto triunfalista del secretario Osorio con los politécnicos en huelga. |
