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Por Macario Ramos Chávez Morelia, Mich.- Son más de cuatro millones y medio de turistas potenciales, que con guerra o conflictos, vienen a nuestro Estado, conviven con sus familias, gastan sus dólares, y no reciben la atención que se merecen, sobre todo por el esfuerzo, que realizan día con día, para mejorar las condiciones de vida de las comunidades origen. La gran mayoría de integrantes de la comunidad migrante michoacana, que radica en Estados Unidos, participa en el turismo religioso, miles y miles de peregrinos, acuden a dar gracias, al Cristo Negro de Carácuaro, la Vírgen de la Salud, Pátzcuaro, El Señor del Amparo, Huandacareo, Cristo Milagroso de San Juan Nuevo Parangaricutiro, El Señor de Araró, Zinapécuaro, tan sólo por citar algunos. Más de 180 mil millones de pesos, han enviado vía remesas, los migrantes que se encuentran en el vecino país del norte, lo que muestra la gran oportunidad, para fortalecer la economía, alentar el empleo y realmente avanzar en el desarrollo. Sin embargo, falta mucho por hacer, para que los dólares que llegan, se inviertan en proyectos productivos, que vaya más allá de la fiesta del pueblo o las fastuosas bodas o quinceaños, como se acostumbra. Que se fortalezca la industria sin chimeneas, es el imponderable. De entrada, las Casas Michoacán, tanto de Los Angeles, California, como en Chicago Illinois, deben funcionar a cabalidad, con suficiente folletería y promocionales, para orientar a quienes tienen previsto venir a uno de los 113 municipios. Cambiar el rutinario modelo de atención migrante, que persiste en el momento actual. En la frontera, se venia colocando un espectacular de bienvenida, por parte del Gobierno de Michoacán, años que no se hace y en contraparte, quienes vienen vía terrestre, sobre todo en los meses de noviembre, diciembre y enero, tienen temor de ser asaltados, por las distintas corporaciones policiacas. Más aún, en el Aeropuerto Internacional de la capital michoacana, salvo un añejo y desvencijado banner, que colocó en su momento, con bombo y platillo, la Canaco Morelia, no hay más. Faltan promocionales, de balnearios, rutas, ofertas, hospedaje y más, mucho más, lo que motive al migrante michoacano, para después de saborear la nieve de Pátzcuaro, vaya con gusto a varios lugares, que se ubican en las distintas regiones y tienen precios accesibles. En el caso de las comunidades mágicas, donde radican miles y miles de artesanos, que elaboran más de un millón y medio de obras, que se exponen en el Tianguis más Grande de América Latina, no existe señalética para que los turistas puedan conocer talleres y adquirir directamente sin intermediarios. Uno de los cientos de casos, San Nicolás Obispo de Morelia, donde se hacen molcajetes y metates de piedra, se desconoce como llegar caminos , quitan la emoción de acudir. Razón por la cual, llegó la hora de dar una efectiva bienvenida a nuestros paisanos, motivarlos para que conozcan más de su entidad, que se se les valore, ellos, a diferencia de muchos, no piden, aportan. Es importante, que se genere una suma de esfuerzos, para aprovechar los escaparates como es Muestra Internacional, Michoacán Today en Las Vegas, Nevada, Las fechas simbólicas de 5 de mayo y 1 y 2 de noviembre. De tal suerte, que existen las condiciones para impulsar un turismo diferente, en un gobierno diferntes, nada más, ni nada menos. |
