|
Arturo CEJA ARELLANO Ahora sí, ha llegado la hora cero al arrancar el día cinco de éste mes de abril, la campaña política 2015 que concluirá el día 7 de junio con las votaciones, en las que estarán en juego: el Gobierno de Michoacán, sus diputaciones federales y estatales, así como sus alcaldías. Primero inician los candidatos para gobernador y diputado federal. Después del día 20 les toca a los que buscan alcaldías y diputación local. Históricas votaciones sin lugar a dudas, por muchas cuestiones, como la elección al unísono de quienes irán a los Congresos Federal y Local, gubernatura y alcaldías, lo que no se había hecho durante mucho tiempo. Históricas porque el INE y el IEM han interpuesto trabas al por mayor a medios de comunicación, a quienes fiscalizarán para frenar la libertad de expresión; y por la ridícula cantidad asignada a candidatos para su promoción. Históricas, porque por primera vez participarán Candidatos Independientes. O sea, quienes no estaban en ningún partido político, que no fueron aceptados por éstos, o que por berrinche puro abandonaron sus filas para seguir siendo candidatos, pero ya con otros colores. Históricas, porque surgieron partidos políticos nuevos, incrementándose a diez los institutos que tendrán oportunidad de buscar hacer suyas las curules en disputa. Mire usted, tenemos a los tradicionales partidos políticos como el PRI, PAN y PRD. Luego les siguen el PT, Partido Verde y Convergencia. Más abajo (por su antigüedad, obviamente) Movimiento Ciudadano, Encuentro Social, Humanista, MORENA, Nueva Alianza, así como la famosa candidatura Independiente. Ésta última se suma a los diez partidos, todos con el aval de las autoridades electorales. Ello infla de manera por demás irresponsable, el gasto que tenemos los mexicanos para elegir a nuestros gobernantes, porque son muchos millones de pesos los que se gastan en ese concepto. A ello agréguenle el gasto que originan los diputados federales y estatales, así como los regidores plurinuminales; sí, esos que ni usted, ni el vecino, ni yo, elegimos, porque nadie vota por ellos; sino que se ganan la curul como premio al número de votos que consiguen los que sí son candidatos, a través de sus respectivos partidos políticos. Y aquí entran los favorecidos. O sea: las amantes, las queridas, los compadres, los que pagaron por ello, los que se mueven mucho (trabajando en campañas, claro está), entre otros que para nada sirven y que no representan ningún beneficio para la sociedad. Amén de que se les paga un jugoso salario, aguinaldo y compensaciones, se les jubila con tan sólo tres años de actividad, cuando un trabajador del campo u obrero, jamás alcanza en toditita su vida ese derecho. Otros, apenas lo logran cuando cumplen los 65 años de edad; o después de 35 años de actividad laboral. ¡Ah! y también se les pagan los salarios y gastos de sus guaruras, como a Luisa María Calderón Hinojosa, ahora candidata al gobierno de Michoacán, nomás por mencionar a alguien y no crean que es por echarle tierra ahora que dio comienzo su actividad política. Bueno, el caso es que los del electorado tenemos ahora mucho material para escuchar, analizar, y elegir por quien votar. Ojalá se haga con responsabilidad y con el vehemente deseo de contar a futuro con buenos gobernantes, porque al parecer los que ahora se han candidateado, son personas que no tienen nexos con grupos sociales mal intencionados; y cuentan con buena moral, con ética y voluntad de trabajar en pos de la construcción de una sociedad más justa y respetuosa, con libertad, educación y cultura que nos forjen como mejores ciudadanos. Ahí están pues. Ya hablaremos de hombres y mujeres inmersos en la política, a fin de que usted, mi amable lector, haga su elección de manera responsable y vote por quien crea que mejor le conviene a Michoacán, no a usted, definitivamente. |
